Entregar un buen beso es un arte, aquí te presentamos aquellos que se han retratado por medio de la fotografía, el cine y otras disciplinas artísticas.
Todo beso es inolvidable. Tanto que casi todas las expresiones artísticas -desde el arte utilitario hasta la más refinada de las obras maestras- han dejado constancia del beso que perdura en nuestra memoria, incluso por más tiempo que el enamoramiento que lo provocó.
Este 13 de abril se celebra el Día Internacional del Beso, desde hace apenas 4 años, pues se eligió conmemorar luego de que en esta fecha, pero en 2013, una pareja tailandesa registró el récord al beso más largo de la historia, con una duración de 58 horas.
Nosotros hemos querido festejar recordando algunos besos famosos, otros no tanto, que el arte nos ha regalado para guardarlos como si fueran propios. Te hacemos aquí una apreciación: el orden no es necesariamente el de importancia, te invitamos a que tu elijas tu beso preferido.
Té de besar. Una artista que nos encanta en Roedor de Lencería es Isis Eglé. Ella ha ilustrado muchos besos, pero quizás el que más nos gusta es el que nos presenta en forma de té, para beberlo poco a poquito. Es el ‘Té de besar’ y se puede regalar para sugerir algo.
El fotógrafo Alfred Eisenstaedt retrató quizás el beso que más se ha difundido en la historia: la imagen titulada ‘V-J Day in Times Square’ que fue capturada el Día de la Victoria sobre Japón, el 14 de agosto de 1945, en el medio de la II Guerra Mundial. En la fotografía, publicada originalmente por la revista Life, se puede observar a la enfermera Edith Shain, quien había salido a celebrar el anuncio entre la multitud sólo para recibir, apenas saliendo del metro, este inesperado beso de parte de el marinero Glenn Edward McDuffie, de 
quien no supo más hasta 2007.
‘El beso en la cama’ es una obra posimpresionista de la autoría de Henri Touluse-Lautrec, un pintor famoso por su trabajo como cartelista para los burdeles más afamados de París, en particular el no menos célebre Moulin Rouge. La extraordinaria intimidad que se plasma en este cuadro, le ha llevado a estimar su valor -en las subastas de arte- por encima de los 11 millones de dólares.
Cuando de cultura pop se habla, el nombre del artista Roy Lichtenstein es obligado. ‘Kiss II’ es una de sus al menos cinco litografías dedicadas a plasmar, el encuentro amoroso entre estos dos personajes. Su estilo, siempre alusivo a las tiras cómicas, refleja fidedignamente la forma en que la juventud de los años sesenta percibía la experiencia de besarse.
Pocas imágenes y experiencias se pueden etiquetar como ‘un beso de película’ con la misma precisión que el que protagonizaron Audrey Hepburn y George Peppard (representando a Holy Golightly y Paul Varjak, respectivamente) en la cinta ‘Desayuno en Tiffany’s’ (O ‘Desayuno con diamantes’, como se tituló originalmente en español). El amoroso osculo bajo la lluvia sella una de las historias de amor más aclamadas de la historia del cine.
Roedor de Lencería 